Gestión del riesgo

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La gestión del riesgo desempeña un papel crucial en la estrategia del Banco, ya que asegura su solvencia y su crecimiento sostenible. El perfil de riesgo ha sido diseñado en línea con las políticas y la estrategia del Grupo BBVA, apoyándose en un modelo de gestión de riesgos que es único, independiente y global.

• Único: Su enfoque tiene un objetivo claro: garantizar una gestión sólida y alineada con el apetito de riesgo definido. Este se basa en métricas fundamentales, la definición de límites para carteras y sectores económicos, así como indicadores específicos para la supervisión y el monitoreo de los portafolios.


• Independiente: La gestión de riesgos opera de manera independiente del negocio, pero complementaria a este. Gracias a la constante adaptación del área, se monitorea de cerca la evolución del negocio, lo que permite identificar oportunidades y mitigar riesgos proactivamente.


• Global: BBVA Perú cuenta con un modelo de gestión de riesgos que abarca todos los riesgos, en todas las geografías y para todos los negocios, proporcionando una perspectiva integral y adaptable a los desafíos del entorno.

Estructura y organización del área de Riesgos

El área de Riesgos centraliza y gestiona los riesgos de crédito y de mercado a través de una estructura compuesta por diversas unidades especializadas:

• Unidades de servicios core:
  • Portfolio Management & Risk Reporting
  • Retail Risk
  • Wholesale & Sustainability Risk
  • Recoveries
  • Market & Structural Risk



Las cinco unidades aseguran un soporte técnico robusto, promueven sinergias entre los equipos y optimizan procesos que abarcan desde la estrategia y planificación hasta la implementación de modelos y herramientas de gestión.

• Unidades de servicios cross:
  • Strategy, Transformation & Performance
  • GRM Data & Analytics

Ambas unidades transversales contribuyen al fortalecimiento estratégico del área, fomentando la innovación y facilitando la toma de decisiones informadas basadas en datos.

Complementando esta estructura, el área de Control Interno y Cumplimiento verifica los controles asociados a los procesos y entregables más críticos del área de Riesgos. Su labor asegura que las operaciones se realicen bajo estándares estrictos, reforzando la confianza y la solidez de la gestión de riesgos del Banco.

Unidad de Portfolio Management & Risk Reporting

La subunidad de Reporting, Monitoring & Data tiene como responsabilidad principal el seguimiento de los indicadores de riesgo asociados a los distintos portafolios. Su labor se alinea directamente con la estrategia y el apetito de riesgos definido por el Banco, asegurando que las decisiones se fundamenten en datos precisos y relevantes. Entre sus funciones se encuentran la medición oportuna de los indicadores clave de riesgo y la comunicación sistemática de los resultados a las instancias de gobierno y gestión correspondientes. Esto garantiza el cumplimiento del marco de apetito de riesgos y una gestión proactiva y adaptativa frente a las dinámicas del entorno.

Por su parte, la subunidad de Measurement & Guarantees se especializa en los procesos de cálculo de las principales métricas de riesgo. Su enfoque incluye la medición de indicadores relacionados con riesgos crediticios, como provisiones, capital regulatorio, capital económico y rentabilidad ajustada al riesgo, así como la gestión funcional de garantías, evaluando su impacto en los procesos regulatorios vinculados a provisiones y requerimientostos de capital. Esta integración asegura una visión holística de los riesgos y refuerza la capacidad de respuesta del Banco ante las exigencias regulatorias y del mercado.

El siguiente gráfico detalla la composición de la unidad:

Por otro lado, con el objetivo de fortalecer la gestión integral de los riesgos asociados y potenciar la estrategia de sostenibilidad dentro del marco de riesgos del Banco, la subunidad de Sustainability fue incorporada a la unidad de Wholesale Risk. Esta integración, ejecutada en diciembre, permitirá una mayor alineación con las políticas y directrices del área, optimizando la sinergia entre ambas funciones.

Gestión del riesgo crediticio

Gestión del riesgo retail

Los siguientes fundamentos describen la gestión del riesgo de crédito en el ámbito comercial o retail:

• Definir los lineamientos y políticas para la admisión de clientes del segmento retail: personas naturales y banca negocios.
• Realizar seguimiento de los resultados del comportamiento de los productos, segmentos y canal de originación (campañas masivas o evaluación individual), analizando sus respectivas evoluciones y desarrollos.
• Detectar señales de alerta de los colectivos de alto riesgo en función de la información estadística y seguimiento del portafolio y establecer medidas correctivas realizando ajustes en la política y lineamientos internos.
• Asegurar, mediante la interrelación con las distintas áreas de negocio y la atención a los órganos supervisores internos y externos, el cumplimiento de las políticas de riesgo de crédito, garantizando el adecuado cumplimiento del marco de apetito al riesgo del Banco.
• Proponer y promover mejoras continuas en los procesos, herramientas y la normativa para una gestión eficiente del riesgo de crédito.
• Difundir y fortalecer la cultura de riesgos en todo el Banco, con especial foco en los programas de formación continua, el desarrollo de las capacidades en las áreas comerciales y de los especialistas de Riesgos.

Gestión del riesgo mayorista

Tiene a su cargo el manejo del riesgo de crédito en los segmentos de Empresas, Corporaciones, Instituciones, Clientes Globales, IFIS y Sector Inmobiliario - Renta, sobre la base de las líneas de actuación definidas en la política de riesgo de crédito mayorista, las fases de originación, admisión y seguimiento.

Se dividió la segmentación del equipo de admisión en tres grupos:

• Stage 1: Estructurado bajo tres enfoques –industrialización, cobertura geográfica y visión sectorial que aseguran agilidad, eficiencia, cercanía y calidad crediticia.


• Stage 2 y Seguimiento Empresas: Opera bajo un enfoque de gestión preventiva, con estrategias para mantener y/o reducir el riesgo del portafolio; contiene el deterioro al estructurar soluciones financieras idóneas.


• Real Estate Risk: Equipo especializado en el sector inmobiliario o bienes raíces, es el encargado de gestionar el portafolio Real Estate y el seguimiento de la cartera.

Adicionalmente, se cuenta con dos equipos transversales a la admisión encargados, entre otros temas, de impulsar iniciativas de mejora continua para la gestión del portafolio:

• Wholesale Risk Governance: Conduce la gestión del riesgo de crédito estableciendo y velando por el cumplimiento de las políticas, normas y procedimientos.


• Wholesale Risk Strategy: Diagnostica el comportamiento de la cartera mayorista para dirigir la estrategia de crecimiento y establecer acciones de gestión preventiva en los colectivos más vulnerables que permitan al Banco evitar contingencias futuras.


• Risk Sustainability: Incorpora los criterios de sostenibilidad (ESG) en la gestión de riesgos. Su trabajo se centra en ejecutar correctamente los procesos de cálculo de métricas ESG, fundamentales para evaluar los riesgos asociados al entorno ambiental, social y de gobernanza, e integrar esta información en los análisis de clientes, lo que promueve una gestión de riesgos ESG alineada con las mejores prácticas internacionales y los objetivos estratégicos del Banco. De esta manera, se asegura que la sostenibilidad sea un componente transversal a toda la gestión del portafolio.

Cabe destacar que se cuentan con herramientas de evaluación crediticia segmentadas que permiten agilizar la toma de decisiones basada en modelos de crédito.

Gestión del seguimiento, cobranza y recuperación

Reúne las funciones y los procesos necesarios para el seguimiento, contención del impago, cobranza, recuperaciones y desinversión del portafolio en problemas, tanto de la Banca Comercial, Banca Empresa y Corporativa y CIB a lo largo de todo el ciclo de vida del crédito. Su objetivo es alcanzar efectividad en los procesos de manera transversal, tanto en los canales de gestión externos (agencias de cobranza y estudios jurídicos) como internos.

La gestión de los portafolios preventivos, en impago y en mora, se articula a partir de una estrategia centralizada que define las acciones diferenciadas por cada uno de los segmentos y para cada etapa del ciclo de vida del crédito, apalancado en políticas de acuerdos y recordatorios de pago, reprogramación, refinanciación y adjudicación de bienes; en la búsqueda de dar solución idónea a cada clientes en los casos viables y minimizar el gasto de provisiones. Finalmente, la palanca de desinversión permite enfocarse en la cartera recuperable y controlar los niveles de morosidad.

Durante 2024 se ejecutó el plan de transformación de cobranzas, el cual incorporó mejoras en los procesos, una plataforma tecnológica y la gestión de la información. Dentro de su ejecución se destacan las siguientes iniciativas:

• Prosalud Financiera: Nueva estrategia de cobranza con foco en la contención de portafolio en etapa preventiva y mora temprana.


• Experiencia única de Oficina Solución: Adoptó nuevos estándares y disciplinas que permitieron maximizar la productividad del equipo.


• Plataforma Única de Cobranzas (Temprana): Permite tener una mayor trazabilidad de las gestiones que se realizan en canales digitales, agencias externas y en Oficina Solución.

En conjunto, estas acciones consolidaron al equipo de Recoveries como un centro de excelencia de cobranza y recuperación con mayor capacidad y productividad respecto al año anterior.

Gestión del riesgo de mercado

El riesgo de mercado hace referencia a la posible pérdida en el valor de las posiciones mantenidas en cartera, provocada por movimientos en las variables de mercado que afectan a la valoración de los instrumentos financieros.

La gestión del riesgo se lleva a cabo mediante métricas alineadas con los estándares del mercado. La métrica de referencia es el VaR (Value at Risk), que mide la pérdida máxima que puede producirse en una cartera con un determinado nivel de confianza (por ejemplo, 99%) a un horizonte temporal (por ejemplo, un día).

La estructura de límites de riesgo de mercado determina un esquema de límites de VaR y capital económico por riesgo de mercado, así como alertas y sub-límites específicos por tipologías de riesgo, entre otros.

El esquema de control se completa con pruebas de validez de los modelos de medición de riesgos utilizados, que estiman la pérdida máxima que se puede producir en las posiciones consideradas con un nivel de probabilidad determinado (“backtesting”), así como mediciones de impacto de movimientos extremos de mercado en las posiciones de riesgo mantenidas (“stress testing”).

Gestión del riesgo estructural

El riesgo de interés estructural y el de liquidez y financiación componen el riesgo estructural en la gestión del Banco.

Riesgo de interés estructural

El riesgo de interés estructural se define como la potencial alteración que se produce en el margen de intereses y/o en el valor patrimonial de una entidad debido a la variación de los tipos de interés.

La gestión del riesgo de tipo de interés estructural está dirigida a mantener la estabilidad del margen de intereses ante variaciones de tipos de interés, contribuyendo a la generación de resultados recurrentes y a controlar los potenciales impactos en el patrimonio por el mark-to-market de los instrumentos clasificados como “held to collect and sale” (en contabilidad local como “disponible para la venta”) así como a acotar las necesidades de capital por riesgo de interés estructural.

Riesgo de liquidez y financiación

El riesgo de liquidez y financiación se define como la imposibilidad de una entidad financiera para atender sus compromisos de pago por falta de fondos o que, para atenderlos, tenga que recurrir a la obtención de fondos en condiciones especialmente gravosas. Dentro de este riesgo, y en función del horizonte temporal en el que se manifiesta el compromiso de pago, es posible hablar de:

• Riesgo de liquidez: El de incurrir a corto plazo en una pérdida ocasionada por eventos que afecten la capacidad de disponer de recursos para cumplir con las obligaciones pasivas más inmediatas, ya sea por imposibilidad de vender activos, por reducción inesperada de los pasivos comerciales o por cierre de las fuentes habituales de financiación.


• Riesgo liquidez intradía: De que una entidad no pueda cumplir con sus obligaciones de liquidación diaria; por ejemplo, por los desajustes en el tiempo que surgen en los pagos o en los sistemas de liquidación relevantes.


• Riesgo de financiación: El potencial incremento de la vulnerabilidad del balance a medio y largo plazo por desviaciones en su objetivo de mantener una proporción de recursos estables acorde a su actividad y de contar con otras fuentes de financiación mayorista estables que permitan una diversificación por plazos y fuentes, evitando la concentración en contrapartidas que acentúan la vulnerabilidad de la entidad en situa ciones de estrés.

Gestión de riesgo operacional

BBVA Perú cuenta con un modelo de gestión de riesgo operacional basado en metodologías y procedimientos para su identificación, evaluación y seguimiento, apoyado en herramientas que permiten su gestión cualitativa y cuantitativa. El modelo se sustenta en una gestión descentralizada del riesgo operacional a través de dos líneas de defensa:

• Risk Control Assurer (RCA): Responsable de promover la gestión del riesgo en sus respectivas áreas, extiende la metodología a los propietarios de procesos, y supervisa la implementación de planes de mitigación y la ejecución de controles.


• Risk Control Specialist (RCS): Define marcos transversales de mitigación y control, en su ámbito de especialidad y de forma transversal en todo el Banco; asimismo, con trasta la implementación de estos marcos con la labor de RCA.

Ambos equipos trabajan de manera coordinada y reportan regularmente al comité de Control Interno y Riesgo Operacional (Ciro) de las áreas.

Por su parte, la unidad de Non Financial Risk del área de Control Interno y Cumplimiento lidera la implementación de metodologías y herramientas de gestión corporativas, además de coordinar la conformación de los equipos de RCA y RCS, supervisar la actualización del mapa de riesgos y monitorear la ejecución de los planes de mitigación.

Para la gestión cualitativa del riesgo operacional, el Banco utiliza la herramienta Migro, que permite registrar los riesgos, asociarlos a los procesos y evaluar los controles críticos. En 2024, se optimizó la funcionalidad del flujo de admisión de riesgo operacional de la herramienta, alineando la metodología actual de evaluación de riesgos y asociándola con el mapa de riesgos.

Adicionalmente, el sistema integrado de riesgo operacional (Siro) complementa la gestión cuantitativa, registrando los eventos de riesgo operacional que generen impactos financieros para el Banco. En 2024, se continuó con la transformación del modelo de trabajo sobre la gestión de pérdidas operacionales y con la implementación de la nueva herramienta Siro 2.0 para la integración de modelos y enfoques (cualitativos y cuantitativos), mediante la unión de las pérdidas y los riesgos del modelo registrados en la herramienta Migro.

En términos regulatorios, BBVA Perú mantiene la autorización para el uso del método estándar alternativo (ASA) para el cálculo del requerimiento de patrimonio efectivo por riesgo operacional, otorgada por la SBS el 22 de diciembre de 2023 y vigente hasta el 30 de junio de 2026, un reconocimiento a la madurez del modelo de gestión de riesgo operacional del Banco.

A diciembre de 2024, el requerimiento de patrimonio efectivo por riesgo operacional sobre la base del método estándar alternativo ascendió a S/788.7 millones, frente a S/734.5 millones a diciembre de 2023.

Gestión de los riesgos sociales y ambientales

[GRI 3-3] [GRI 201-2]

El impacto de las actividades de BBVA Perú sobre el ambiente y la sociedad se realiza de dos formas: de manera directa, a través del aprovechamiento responsable de los recursos naturales y de la relación con sus grupos de interés, y de manera indirecta, mediante la actividad crediticia y los proyectos de financiamiento.

Los riesgos climáticos, ambientales y sociales pueden afectar el perfil crediticio de los prestatarios o de los proyectos que se financian, lo que a su vez dañaría la calidad del riesgo asumido, que se percibiría en potenciales riesgos operativos o crediticios, de liquidez o de mercado. Para la adecuada evaluación de las operaciones crediticias, el Banco gestiona y desarrolla herramientas y procesos que integran aspectos ASG (ambientales, sociales y de gobernanza) con variables financieras que le permiten identificar el perfil sostenible de sus clientes y su exposición a posibles impactos asociados. Esta labor es coherente con el principio de prudencia que rige la actividad del Banco y se concreta en diferentes líneas de actuación.

La unidad de Wholesale & Sustainability Risk incluye, dentro de su gestión, la subunidad de Risk Sustainability, encargada de implementar y monitorear el uso adecuado de las herramientas ASG y sus resultados para una correcta evaluación de los riesgos asociados a la sostenibilidad en el portafolio.

La estrategia de la Unidad está enfocada en darle evolución al modelo crediticio incorporando riesgos ASG en la gestión del portafolio de clientes a través de cuatro ejes: a) gestión de herramientas, procesos y data; b) refuerzo de base normativa y políticas, c) formación y difusión para el desarrollo de capacidades de los equipos y d) monitoreo y reporte para el seguimiento interno y externo.

Para a cumplir los ambiciosos objetivos de descarbonización y apoyar a los clientes en su transición brindado el asesoramiento adecuado para la identificación de oportunidades, el Banco gestiona dos grandes frentes en el ámbito de sostenibilidad:

• Riesgos climáticos: Riesgos físicos (agudos, como inundaciones, ciclones o sequías, y crónicos, como estrés hídrico y aumento de temperatura o nivel del mar) y de transi ción (regulatorios, de mercado o reputacionales, tecnológicos) con impacto alto y muy alto en la cartera del Banco.


• Riesgos socioambientales: Potenciales impactos ambientales y sociales de proyectos de inversión de los clientes.

Adicionalmente, se les denomina HTR (sigla en inglés de High Transition Risk, alto riesgo de transición) a los clientes de sectores y actividades más sensibles al riesgo de transición. Así, son sectores HTR los generadores de energía o combustibles fósiles (petróleo y gas, generación de electricidad, minería del carbón), los de industrias básicas intensivas en emisiones (acero, cemento) y los de actividades usuarias finales de la energía y generadoras de emisiones a través de sus productos o servicios (autos, aviación y transporte marítimo).

Gestión de riesgo climático

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Para la gestión de este tipo de riesgos, BBVA Perú utiliza diversas metodologías y herramientas que permiten el correcto seguimiento de impactos para mantener la cartera saludable y encaminada hacia la transición climática.

• Partnership for Carbon Accounting Financials (PCAF): Metodología para calcular las emisiones financiadas de la cartera lending de BBVA Perú en los activos: financia ción de proyectos, préstamos para empresas, préstamos para vehículos motorizados, inmuebles comerciales e hipotecas.


• Transition Risk Indicator (TRi): Herramienta que, con un enfoque sectorial y en base al análisis de las variables más significativas, permite evaluar el perfil actual de emisiones de cada cliente y la madurez de sus estrategias de descarbonización. Categoriza a los clientes según su riesgo de transición y la madurez de sus planes, realizando un asesoramiento personalizado de su estrategia de descarbonización.


• Límite High Transition Risk (HTR): Límite de concentración para la exposición de clientes del portafolio relacionados a actividades consideradas clave para la descarbo nización del planeta, tanto para Wholesale Risk como SME.


• Límite High Market Misalignment (HMM): Margen de concentración del portafolio que considera a los clientes que mantienen emisiones anuales de CO2 >30% de las emisiones promedio del mercado para el sector de generación de energía.


• Paris Agreement Capital Transition Assessment (PACTA): Metodología que permite a BBVA monitorear el alineamiento de su cartera con el Acuerdo de París y sus objetivos de descarbonización en los sectores de energía, acero, cemento y petróleo y gas.


• Client Sustainability Toolkit (CST): Herramienta que reúne, en un único repositorio, información ESG de grandes corporaciones y/o entidades necesaria para la gestión, lo que facilita su acceso y uso por parte de los equipos que manejan la relación con los clientes.

Durante la gestión de 2024, se obtuvieron los siguientes avances para la medición e integración de los riesgos de transición:

1. Resultados de aplicación de la metodología PCAF

2. Indicadores de riesgo de transición

3. Resultados de medición de actividades más expuestas a riesgo de transición

Gestión de riesgo socioambiental

[FN-CB-410a]

BBVA Perú amplía su conocimiento relacionado con la sostenibilidad de sus clientes mayoristas a través de procesos que evalúan la correcta gestión de los impactos ambientales y sociales mediante una debida diligencia para la identificación de riesgos y oportunidades.

Adicionalmente, la norma de gestión del riesgo de crédito mayorista incluye, en la admisión de operaciones, la evaluación de los riesgos asociados con los factores ASG, una integración para el análisis de riesgos apoyada en:

• Análisis del cumplimiento del marco medioambiental y social.
• Análisis de los factores de sostenibilidad relevantes, según la pertenencia sectorial del cliente.
• Aspectos de sostenibilidad incluidos en las políticas sectoriales para el establecimiento de la política de riesgo con el cliente.

Principios de Ecuador (PE)

[GRI 2-23, GRI 2-24]

El Grupo BBVA se ha adherido, desde 2004, a los Principios de Ecuador (PE), que toman como base la política y normas de desempeño en sostenibilidad social y ambiental de la Corporación Financiera Internacional (IFC) y las guías generales sobre ambiente, salud y seguridad del Grupo Banco Mundial (WBG). Bajo estos lineamientos, aplica los estándares de los PE para determinar, evaluar y gestionar los riesgos ambientales y sociales en la financiación de proyectos de inversión de más de US$50 millones, un mínimo de dos años de plazo del financiamiento y cuyos flujos destinados al repago de la facilidad otorgada provengan de la generación propia del proyecto.

Los PE son un compromiso asumido por el comité de Dirección del Grupo BBVA y los grupos de trabajo en los que participa, y son el punto de partida para aplicar las mejores prácticas de financiación responsable y el marco de diálogo con los clientes y grupos interesados en los proyectos que financia. En línea con este compromiso, todas las decisiones de financiamiento de proyectos tienen como base el criterio de rentabilidad ajustada a los PE. “Poner al alcance de todos las oportunidades de esta nueva era” implica atender las expectativas de los colectivos interesados en los proyectos y la demanda social de lucha contra el cambio climático así como respetar los derechos humanos.

La metodología de análisis de los proyectos consiste en someter cada transacción que se presenta a un proceso de due diligence a cargo de asesores técnicos especializados en dos aspectos: ambiental y social. Una vez asignada una categoría (A, B y C), la revisión de la documentación aportada por el cliente y por los asesores independientes permite valorar el cumplimiento de los requisitos señalados en los PE en función de los aspectos mencionados tanto en las etapas iniciales (en el caso de un financiamiento de proyecto) como en la de operación.

El equipo de Investment Banking & Finance asume la responsabilidad de análisis de los project finance, la representación del Banco ante los grupos de interés, la rendición de cuentas ante la alta dirección y el diseño e implementación del sistema de gestión. La revisión de los riesgos y las oportunidades de carácter económico, ambiental y social es realizada mensualmente por el Directorio.

Durante 2024, se evaluó el Proyecto San Martín, el cual consistió en la construcción y puesta en marcha de un parque fotovoltaico de 252 MW/AC de potencia en el distrito de La Joya, en el departamento de Arequipa. La inversión total fue de US$220 millones, siendo el financiamiento por US$160 millones Senior Loan + US$18 millones VAT Facility (PEN). Vale señalar que el sponsor Zelestra es un desarrollador con amplia experiencia en este tipo de proyectos. La participación del Banco en el proyecto fue de 25% en el Senior Loan y 100% en el VAT Facilty.

Sistema de administración de riesgos ambientales y sociales (SARAS)

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BBVA Perú se alinea al “Reglamento para la gestión del riesgo social y ambiental” (Res. SBS Nº 1928-2015), que toma como referencia los Principios de Ecuador y las normas de des empeño de la IFC, gestionando el riesgo social y ambiental de los clientes que buscan financiar proyectos considerando los requisitos mínimos establecidos en dicho reglamento. Durante 2024, se realizó, junto con el IFC, un advisory que estableció mejoras para el SARAS que robustecieron la evaluación y ampliaron el alcance del sistema, actualizando la política y procedimiento de riesgos ambientales y sociales para su adecuada identificación, evaluación y gestión, vigentes desde 2015.

Las operaciones que durante 2024 pasaron por SARAS son las siguientes:

• Operaciones de financiamiento para proyectos inmobiliarios con certificación sostenible Edge o Leed.
• Operaciones que superaban los US$10 millones para inversiones de capital (capex), según la Res. SBS Nº 1928-2015.
• Operaciones marcadas como sostenibles bajo la taxonomía BBVA.

La metodología de evaluación SARAS sigue las recomendaciones del IFC Banco Mundial para mejores prácticas y busca desarrollar un due diligence que toma en consideración tanto los criterios de las normas de desempeño del IFC como aspectos de la regulación local asociada a la buena gestión ambiental y social de los impactos de los clientes.

El SARAS se alinea con la metodología de los Principios de Ecuador de categorización, siendo el equipo técnico especializado y autónomo de Risk Sustainability el que realiza las evaluaciones. Durante 2024 se realizó la evaluación de los riesgos ambientales y sociales de 35 clientes, dando respuesta al alcance del sistema. Además, se brindaron formaciones especializadas a los equipos de Negocios, Legal, Estructuración, Sostenibilidad y Riesgos sobre la correcta identificación y evaluación de los riesgos climáticos, ambientales y sociales de las operaciones del Banco.

Durante 2024, se obtuvieron las siguientes clasificaciones sobre la evaluación del sistema de riesgo ambiental y social de las operaciones dentro del alcance:

• Riesgo Alto (A): 2 operaciones
• Riesgo Medio (B): 32 operaciones
• Riesgo Bajo (C): 1 operación

Riesgo reputacional

Para BBVA Perú, el riesgo reputacional se entiende como la potencial pérdida en sus resultados como consecuencia de situaciones que pueden afectar negativamente a la percepción de sus diferentes grupos de interés. La gestión de este tipo de riesgo tiene como objetivo garantizar que la actividad del Banco se realiza siguiendo los principios de legalidad, integridad y transparencia, así como asegurar que este mismo no participa en actividades o prácticas que pudieran ocasionar un daño permanente o muy relevante a su reputación.

La evaluación del riesgo reputacional se realiza siguiendo una metodología que le permite al Banco definir y revisar regularmente un mapa que prioriza los riesgos reputacionales a los que se enfrenta, así como un conjunto de planes de acción para mitigarlos. Esta prelación se realiza atendiendo a dos variables: 1) el impacto en las percepciones de los grupos de interés y 2) la fortaleza del Banco frente al riesgo.

Tal práctica se ejecuta todos los años en los países donde opera el Grupo BBVA, incluyendo el Perú y sus resultados se reportan en el área geográfica del ámbito de gobierno que corresponda.

Adicionalmente, el equipo de Reputación participa con el resto de integrantes de la segunda línea de defensa del Banco en los diferentes comités de Admisión del Riesgo Operacional, tanto a nivel corporativo como en las distintas áreas geográficas. En dichos comités se realiza una identificación inicial de potenciales riesgos reputacionales y, de ser necesario, se proponen controles para su mitigación.